Luces Rojas (Red Lights): Confrontando lo sobrenatural
Solo hay un modo de acceder a la verdad y es no esperar nada. Si nuestras intenciones no son puras, podemos acabar creando monstruos (Citado en la película)
Rodrigo
Cortés escribe y dirige una atrapante película de suspense en la que se nos
invita a reflexionar entorno a la naturaleza de los fenómenos paranormales y
acerca de la veracidad de los poderes extrasensoriales que parecen ostentar
ciertas personas
Más allá
de su excelente guion, Red Lights (2012) destaca por el brillante trabajo
actoral de sus protagonistas y asimismo por la estudiada escenificación que ensalza
la tensión dramática de una película que se inspira en el libro Fraudes
Paranormales (1980) de James Randi, un trabajo de indagación que cuestiona
al mítico psíquico Uri Geller
En la
ficción, la doctora Margaret Matheson (Sigourney Weaver) y su joven colega Tom
Buckley (Cillian Murphy) se dedican a investigar fraudes paranormales. Y en su
misma universidad, el doctor Paul Shackleton (Toby
Jones) dirige un departamento que por el contrario busca certificar que lo
sobrenatural existe y al tiempo demostrar que hay psíquicos cuyos poderes son
auténticos
Un pulso
científico que se tensionará cuando el poderoso Simon Silver (Robert de Niro)
decida volver a mostrase en público décadas después de su polémica retirada. En
ese retorno del divo psíquico, Margaret rememorará un pasado en el que sus
convicciones científicas y su sentir íntimo se entremezclan dolorosamente
Como
curiosidad, señalar que algunas localizaciones de la película son barcelonesas:
Es el
caso del magnífico Teatre Tívoli tan cercano a la célebre Plaça de Catalunya,
el bello teatro L’Aliança del Poblenou en plena rambla de un barrio marítimo impulsado
por los JJOO del 92 o la facultad de Ciencias Empresariales de la histórica
Universitat de Barcelona
Y más
allá de la capital catalana (la ciudad en la que nací) otras poblaciones de la
provincia tienen también su protagonismo, por ejemplo Cornellà de Llobregat que es la
localidad donde resido actualmente. Por ese doble motivo y por otros más
profundos, Luces Rojas es una película que siento muy cercana
Debo
advertir que el análisis que sigue contiene espoilers
Segura e implacable
Desde el minuto cero se nos muestra la fuerza y la seguridad que ostenta la veterana científica Margaret quien con la ayuda del joven doctor Tom desenmascara la verdad de todos los casos paranormales a los que es convocada como reputada especialista en la materia
Nada se
le escapa, y pese a la escasez de medios con los que cuenta su departamento,
siempre se las ingenia para demostrar que esos sorprendentes fenómenos y esas
personas con “poderes” son pura farsa que se alimenta de los ingenuos e
incautos que se dejan embaucar por ellos
En este
sentido, la vemos tratar con dureza y desprecio al amable doctor Shackleton. Margaret disfruta desmontando los casos que su colega
opuesto le presenta como auténticos
Y se
siente muy satisfecha cuando consigue cazar in fraganti a un famoso psíquico
que se vale de información privilegiada de algunos asistentes a sus
espectáculos y una sofisticada conexión audiofónica con su ayudanta para representar
unos poderes inexistentes. El farsante
es detenido y acaba en prisión
Un gran
éxito para Margaret y su cohesionado equipo, pero como se ha comentado todo
cambiará cuando al poco tiempo un viejo conocido regrese a los escenarios…
El espejo oscuro
En
efecto, el invidente vidente Simon Silver -el más famoso psíquico vivo- anuncia
que vuelve tras décadas de inactividad. Tom quiere cazarlo con la misma
metodología utilizada con ese farsante encarcelado, pero Margaret -que parece
temerle- no está por la labor
Así que
el joven científico decide investigarlo en solitario, pero es descubierto por
el poderoso ciego desatándose una gran fuerza destructiva en las instalaciones del
teatro donde ambos se encuentran: uno a la vista actuando-deslumbrando y el
otro escondido observando-descifrando
Paralelamente
a esa impactante furia electromagnética, Margaret sufre un infarto cerebral que resultará mortal. Muere la histórica rival de Silver como murió años atrás un
periodista que buscaba desenmascararlo, fue por esa criticada muerte que el
divo decidió retirarse
Y por
esa muerte inesperada actual sabremos qué hay tras el miedo de Margaret a
Silver. En efecto, se nos muestra como décadas atrás el poderoso psíquico la
puso contra las cuerdas en un debate televisivo al evocar a su hijo: un niño
que sufrió un desvanecimiento y que desde entonces está en coma enchufado a una
máquina. La implacable científica dudó como madre humana que escucha
en voz de Silver el supuesto reclamo del hijo a dejarle marchar de este mundo
Así
pues, Silver es el espejo oscuro -el psíquico viste y gusta de rodearse de
negrura- de una mujer que pese a su seguridad científica es humana, una mujer cerebral a
la que le incomoda quitarse su protectora bata blanca para descubrirse como
madre de corazón sensitivo
Pero si Silver
es espejo de la doctora, entenderemos que lo es mucho más del joven doctor
quien tras la muerte de Margaret con mayor motivación persiste en su particular
cruzada para desenmascarar al "rey de los psíquicos"
Aceptar, aceptarse
Y simbólicamente lo investiga conduciendo el viejo coche de su maestra. Tom y Margaret de alguna manera siguen juntos, pero ahora es él quien lidera la búsqueda para encontrar la verdad que esconde Silver
Por su
parte el divo aprovecha que ya no está ella para ofrecerse a ser examinado por
el predispuesto doctor Shackleton con el objetivo de que su departamento autentifique sus
poderes
Cortés
nos muestra de forma sublime la tensión que experimenta Tom en su empeño por derrotar a Silver persiguiéndole a todos lados y simultáneamente investigando -con
la ayuda de unos alumnos fieles- las grabaciones de las pruebas a las que se
somete para su validación científica
En este
sentido, lo vemos en una consulta donde el psíquico atiende personalmente. Allí
en un escenario muy oscuro -en el que destaca una simbólica gruesa línea de sal
sobre el suelo que divide el espacio en dos a modo de cancha de confrontación-
Silver habla y Tom le escucha intentando comprender unas palabras cargadas de
significado
Y es que
a menudo en la temida oscuridad se guarda la verdad negada que busca ser
reconocida, una verdad cuyos reveladores mensajes son potencialmente
transformadores para quien se atreve a ponerlos en práctica. Silver se explica:
“Ser o
parecer, todos intentamos ser algo que no somos” Y le habla sobre la necesidad
de conocerse, de saber si los instrumentos racionales propios para lograrlo son
realmente fiables: “Sólo hay un modo de acceder a la verdad y es no esperar
nada. Si nuestras intenciones no son puras, podemos acabar creando monstruos”,
concluye el mensajero oscuro de intenciones para nada puras
Se comprobará definitivamente esa aberrante condición personal en la mejor escena de la película que transcurre nuevamente en un teatro donde el poderoso
psíquico deslumbra a su numeroso público
Allí
todo cambiará radicalmente: Tom ya no se esconderá ni callará más y se
enfrentará cara a cara con Silver ante el asombro de todos los presentes. Lo
hará muy magullado por un esbirro del divo que de este modo pretendía evitar su
aparición en escena. Pero Tom se ha levantado sobre sí mismo demostrando en ese épico
levantarse que tiene una fuerza descomunal
Lo vemos
caminando por el pasillo central con la seguridad de quien se conoce y se
acepta, se va acercando poco a poco a Silver desafiándolo sin el menor miedo. En
esa aproximación, Tom despierta a los presentes del encantamiento del divo
invitando a un hombre a sentarse porque “nada ni nadie se lo impide” y destacando
la gran importancia del llegar a conocerse y aceptarse:
“Llevamos
nuestras cabezas llenas de ruido y renunciamos a conocernos. Yo lo he intentado
con todas mis fuerzas, pero uno no puede negarse a sí mismo siempre”
Le habla
al público y más que nada se habla a sí mismo. En efecto, conforme avanza nos
vamos dando cuenta de que Tom es el psíquico puro y no Silver -un psíquico
tramposo que en su no pureza ha devenido monstruo-. El oscuro está sorprendido
-y nosotros- al comprobar que es el joven quien está descargando su descomunal
fuerza sobre ese gran espacio
Y después
de esa nueva tormenta energética que lo sacude todo, los vemos frente a frente
en pie. Silver sin sus protectoras gafas le pregunta cómo lo ha hecho y Tom que
sonríe lanzándole una reveladora moneda de plata -silver en inglés- que el
falso ciego pilla al vuelo y que simbólicamente le hace retroceder un paso
atrás. Y ante todos con rabiosa calma, Tom lo identifica como lo que es: un
farsante
El joven
científico ha desenmascarado al “poderoso” señor oscuro porque con valor ha
aprovechado su propio reflejo en él. Tom se ha aceptado como psíquico puro
(Cortés nos muestra como era él mismo quien lo provocaba todo en su lucha
interior) y reconoce ahora que quiso ayudar a Margaret precisamente para
desterrar aquello que es y que no aceptaba
Como colofón y en ese sano empoderamiento personal, Tom honra a Margaret con sabias palabras mientras lo vemos desconectando a su hijo de la máquina que durante décadas lo ha mantenido en una falsa vida:
“Tú lo has hecho casi todo mirando
donde no debías. Hice lo que habrías querido. Pero nunca me hubiera perdonado
no haberme mostrado. No haberte dado al menos el consuelo de saber que hay algo
más”
Hay algo
más pese a tanta farsa y tanto farsante nos dice Cortés en boca del heroico
Tom, nos lo dice como conclusión de una excelente obra audiovisual que nos
invita a confrontar lo sobrenatural y en el fondo a confrontarnos a nosotros
mismos
A Joan y Miquel, en el recuerdo de tantas apasionantes jornadas de
investigación radiestésica juntos
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